miércoles, 30 de abril de 2014

Enfrentar

Ya pasó lo peor: la sorpresa, el baldazo de agua fría, el volcán de emociones, el miedo inaguantable. Ahora sigue el miedo, pero ya tamizado por la razón y, sobre todo, por la aceptación del nuevo escenario. Resistirse, luchar contra la idea de lo que nos está pasando no hace más que complicar las cosas, volver cada minuto más doloroso, y acá el tema es sufrir lo menos posible.
Emilia tiene tres problemas en el corazón. No entiendo los detalles ni las precisiones médicas, que me superan, solo sé que es una cardiopatía congénita grave. Pero está viva, y aparentemente va a estarlo hasta su nacimiento, porque todo lo demás está perfecto. Así que después de estos días que nos tomamos de licencia para llorar y hacer el duelo de nuestras fantasías nos estamos rearmando con toda la fuerza del mundo para pelearla hasta el final.
Emilia eligió venir a esta vida y resistir; no vamos a ser justamente nosotros quienes bajemos los brazos.

8 comentarios:

  1. Es la tercera vez que vengo a leer y quiero escribirte algo y no se qué. Me pasé toda la tarde pensando en ustedes. Les mando un abrazo enorme!!

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    1. Gracias Irene, con la compañía alcanza. Además, saber que los demás tiran buena onda es genial. Beso y abrazo :)

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  2. te abrazo con toda la fuerza que el mundo virtual pueda hacerte llegar, besote enorme, seguimos rezando por ustedes.
    Lili

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    1. Gracias Lili, necesitamos toda esa buena vibra para el corazoncito de Emilia. Muchas, muchas gracias :)

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  3. Como Irene no se que decir, salvo que las tengo en mi pensamiento y oraciones.

    Un beso grande, Phoebe

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    1. Gracias Phoebe, lo mismo: la compañía y la buena vibra, fundamental para nosotros :)

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  4. Pienso que Emilia tiene la suerte de tener una madraza como vos.

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